…“Enfermera: La paciente ya reacciono; puede entrar a
verla una persona a la vez, solo no traten de fatigarla porque a pesar de que
no este grave el golpe si resulto ser fuerte”…
Narra
Young Jae:
Después
de esas palabras de la enfermera el tío Sebastián no espero más y de un solo
brinco se paró del lugar asiento donde se encontraba y siguió a la enfermera
hasta la habitación donde se encontraba nuestra pequeña Khiara, pero por otro
lado mi papá se fue del lugar; al parecer había surgido mucho trabajo que no
podía esperar y estar más seguro de que Khiara se encontraba en buen estado se
retiró del hospital, pues bien su presencia en ese lugar era de más si ella se
encontraba bien y debía ver que todo estuviera bien en la empresa así que me
dejo encargado de lo que pasara y para que también ayudara al tío Sebastián.
Ya
entre la despedida de mi padre y que el tío ya no se encontrará en ese lugar
note que la sala de espera estaba sola, solo quedaba yo, eso por un momento me
incomodo pero no tardó mucho en que pasará varia gente por el lugar, algunos
llorando, otros con sonrisas de oreja a oreja, todos por cosas diferentes
que a ciencia cierta no conocía. No
tenía nada en que pasar mi tiempo más que viendo a las personas que iban y
venían del lugar; pero hubo algo que llamo totalmente mi atención, a mi lado se
sentó un chico que por un momento pensé no tenía nada pero después de quedarme
como un tonto analizándolo note que tenía unos cuantos rasguños tanto en los
brazos como en el rostro, la ropa algo rasgada y ensangrentada y además de ello
también tenía una de sus manos vendada. ¿En qué clase de lugar vivimos para que
pasen todo tipo de accidentes y haya tantos heridos de tantas formas?
Seguramente que los detectives no estamos haciendo muy bien nuestro trabajo o
hay demasiados maleantes haya afuera que debemos atrapar.
Poco
a poco fui perdiendo interés de lo que pasara a mi alrededor y es que no sé
cuánto tiempo ya había pasado desde que el tío Sebastián se fuera a ver a
Khiara y aun no regresara; cada vez me ponía más nervioso y ansioso por no
poder ver a mi pequeña. De alguna forma debía evitar este nerviosismo que me
estaba invadiendo, ¿pero qué?... no podía tener encendido mi celular y no tenía
nada más a la mano para poder distraerme un poco… Poco paso para que me diera
cuenta que la respuesta estaba a un lado mío, tal vez para no sentirme tan mal
podría hacer algún tipo de plática a
aquel chico, pero cómo empezar una conversación con alguien en ese estado y más
aún que se notaba que estaba algo nervioso y en cierto modo ¿enojado?. Estaba
tan concentrado en que decir que no me dí cuenta cuando llego mi tío, por fin regresaba
y lo mejor es que era diciendo:
--- Mi
hija quiere
Narra
Khiara:
No
sabía exactamente lo que había pasado, pero por fin sentía como salía de ese
profundo sueño y me incorporaba nuevamente en la realidad; cuando cobre la
conciencia un poco más pude notar que a mi lado se encontraba una enfermera que
inyectaba suero a uno de mis brazos. No tarde mucho en saber que aquella chica
era una enfermera amable pues cuando noto que estaba ya consciente me pregunto
cómo me sentía y que si tenía ánimos para ver a familiares ella hablaría con el
doctor para dejarlos pasar al menos un momentos y con la condición de que fuese
de uno por uno, esa pregunta me hizo muy feliz así que atendí a aquel gesto con
una sonrisa incitándola a que les hiciera pasar, la verdad es que después de lo
que paso y el miedo que llegue a sentir algunos momentos moría de ganas de ver
a mi papá.
Ya
cuando la enfermera había salido de la habitación me dedique a observar el
lugar en el que me encontraba y sobre todo traté de incorporarme totalmente
para recordar todo lo que había ocurrido pero no lo logre y en vez de ello solo
pude sentir como mi padre se abalanzaba sobre mí; no puedo negar que me dolió
un poco el cuerpo pero eso no fue una barrera para que una pequeña sonrisa se
dibujara en mi rostro, lástima que no tardó mucho en desaparecer pues empezó a
regañarme dando argumentos que era muy descuidada, no ver por donde andaba, por
no ver si se encontraba en verde o rojo un semáforo, etc. etc. etc. La verdad
es que tenía un poco de miedo al recordar que al parecer había sido casi
atropellada pero trate de calmarlo
diciéndole que no había pasado nada (a excepción del susto); cerré mis ojos y como
llego un flechazo de recuerdos sobre el accidente a mi mente así que de un
momento a otro quien no paraba de hablar era yo.
Eran
tantas cosas las que decía y de manera tan rápida que note que mi papá no estaba
entendiendo nada… El me calmo y ya recobrado un poco el aliento hable de manera
más clara, quería saber dónde estaba el chico que me salvo, si estaba bien, si
no le había pasado nada grave por mi culpa… Nuevamente empecé a hablar muy
rápido no dejando el tiempo necesario para que mi papá pudiese responder cada
una de mis preguntas pero cuando se lo di me tranquilizo el hecho de que
asegurara que se encontraba bien y que el accidente solo le dejo algunos
rasguños pero no le había pasado nada grave. Un gran alivio se apodero de mí
---
Papá, necesito verle… ¿podrías decirle
que venga?
Narra
Young Jae:
“Mi hija quiere verte”
Después
de esas palabras de mi tío que sonaron como mágicas para mis oídos me disponía
a levantarme e ir a ver a mi pequeña pero… algo no estaba bien aquí, la persona a la que
se dirigía no era a mi sino a aquel chico que se encontraba a un lado mío…
estoy seguro que la sorpresa fue para ambos pues al saber que se dirigía a él ninguno
de los dos reaccionaba, de hecho después de levantarnos del asiento solo nos
quedamos extrañados viendo al tío Sebastián y al mismo tiempo nos mirábamos
entre nosotros. ¿Quién ere él?... ¿Por qué Khiara quiere verlo a él y no a mi o
a mi padre?. Pronto aquel lugar que estaba en lo que cabe decir tranquilo
cambio su atmosfera a una muy pesada en cuestión de unos segundos. Después de
notar aquello solo sentí unas pequeñas palmaditas en mi hombro y seguido de
ello vi como a aquel chico le pidió que le siguiera a la habitación de mi
Khiara.
Pero… ¿Qué
es esto?.. Mi corazón… siento como si mi corazón hubiese sido estrujado... ¿Qué
es este sentimiento que duele tanto?... Simplemente es algo que no puedo
explicar, algo que jamás había sentido.
Narra
Khiara:
No
tenía mucho tiempo de que mi papá había salido de la habitación cuando ya
deseaba tener enfrente mío a aquel chico, quería comprobar no solo que se
encontraba bien, sino que también quería saber si trataba de un chico o si era
mi ángel guardián y salvador. Sé que son alucinaciones mías pero cuando le vi a
los ojos hubiese jurado que era un ángel. Si es en realidad un chico cualquiera
quiero comprobar que no le paso nada grave debido a está mi cabezote hueva… Espero
no se haya marchado del hospital; ya que por una extraña razón quiero tenerlo
enfrente mío nuevamente, me encantaría ver sus ojos, escuchar de manera más
clara su voz y…
---
Khiara: “AShh Khiara el golpe te hizo daño o por qué estás diciendo tremendas
idioteces; creo que tendré que ir al lugar del accidente para ver si no se
quedó algún tornillo mío tirado por ahí.”
---
Creo que el golpe te afecto un poco o.. ¿Siempre tienes ese tipo de
conversaciones con tu amigo imaginario?... tal vez deberías presentármelo;
aunque no creo entenderle mucho ya que no habla coreano o sí puede? - Dijo esbozado una enorme sonrisa y
dejándome más que apenada ante aquel comentario y esas hermosas muecas que
hacia mientras se refería a mí. En estos momentos estaba agradecida de hablar
en español y no en coreano en algunas ocasiones… casi siempre hacia esto cuando
pensaba en voz alta pero a pesar de que el no entendió nada de lo que yo
hubiese dicho realmente me sentía muy avergonzada por lo que solo atine a
taparme la cara con las sabanas que había en la camilla y así me quede un buen rato hasta que
hablo nuevamente --- pensé que querías verme o… no te sientes bien?.. puedo
llamar al doctor si así lo deseas--- … Que tonterías estaba haciendo, se supone
que ya no era una niña pequeña pero me estaba portando como tal así que poco a
poco destape mi rostro y sentí como mis mejillas nuevamente se ponían rojas al
igual que mis orejas (siempre eran lo primero en delatar mis peores momentos de
timidez/vergüenza) --- Ya veo por qué ocurrió
el accidente; deberías ser menos distraída en todo lo que haces como cruzar la
calle.
---
Khiara: Sí, y de verdad siento que mi culpa te hayas herido, hubiese sido mejor
que no te encontrarás ahí en ese momento y que no salieras lastimado, tienes
rasguños y además de ello tienes sangre en la ropa –Era vergonzoso que alguien
que no conocía hubiera terminado así por mi culpa así trate de hacer una
reverencia, cosa que no me salió tan bien ya que mi cuerpo dolía un poco.
---
¿Entonces hubieses preferido morir?... solo ten cuidado la próxima vez.. ok? –
Nuevamente hacia resaltar aquella sonrisa suya… Ash que me pasa? Me siento tan
rara y nerviosa con él, parece que me estoy volviendo loca igual que mi corazón
en estos precisos momentos.. ¿Es por el golpe?’--- Mmmm.. Tome tu celular para
marcar a tu padre toma--dijo dándome el celular con una de sus manos pues al
parecer la otra la tenía vendada, otro punto para sentirme un poco más mal---
Me tengo que ir.
---
Muchas gracias – Dije mientras tomaba el celular, pero en ese acto rose mis
manos con la suya provocando que mi rostro ardiera.
---
Bueno me tengo que ir; espero que te den de alta muy pronto y que ya no seas tan
despistada.
---
Espera!!... puedes darme tu número de celular?- Ashh, seguro que soné muy tonta
por la cara que puso, pero debía recompensarlo de alguna manera por haberme
salvado la vida y si no pedía su número
de celular estaba segura que no lo volvería a ver jamás.
---
Hee?? –
---
Khiara: Bueno eres la persona que me salvo y me gustaría pagártelo de algún
modo
---
Oh claro – tomo nuevamente mi teléfono y marco de mi celular al suyo, pero por
alguna razón jamás lo saco- Así tendremos el número del otro
---
Khiara: Si, está bien… y nuevamente gracias. Oye pero no tengo tu nombre para
guárdate en mis contactos… yo soy Khiara.
---
Que raro pero bonito nombre Khiara, yo soy
Dae Hyun , Jung Dae Hyun, haaa y por cierto tienes unos ojos muy
grandes, espero los uses para ver por dónde andas. – Se acercó nuevamente a mí
y me miro directo a los ojos, eso me hizo sentir realmente extraña así que
evite verlo directamente y como pude me aleje un poco de él- Sabes ahora que los veo de más de cerca puedo
notar que son muy bonitos… comienzo a sentir envidia de tu novio- y después de
decir eso en un rápido movimiento se alejó de mí para con un movimiento de
manos darme un adiós.
Suelo
ser algo retardada y cuando reaccione sobre todo lo que había pasado fue cuando
supuse que aquel “novio” era Young Jae; soy tan tonta que no recordaba que
antes del accidente tenía una cita con él, debe estar muy preocupado pero me
siento tan cansada que me acomode en la camilla para descansar un poco y no
tardando mucho para que me perdiera en un sueño.